La exposición Fragile presenta un conjunto de cinco instalaciones del escultor español Santiago Villanueva (Madrid, 1964) realizadas entre 2012 y 2015, sintetizando la evolución de su creación reciente.
Trabajando con técnicas de moldeado, fundición y acabado, Villanueva confiere a sus objetos una imaginería orgánica o mineral, que se manifiesta especialmente en las formas esféricas o tubulares de su predilección, como antenas, lágrimas o estalactitas, pero sobre todo son las formas transicionales, las que están en un momento detenido de cambio hacia una nueva conformación, las más abundantes e impactantes en la obra del artista.
Apelando a los aspectos sensoriales de las obras del artista, así como a la reflexión sobre la escultura como médium que vehiculan, la comisaria Mónica Álvarez Careaga nos propone contemplarla de un modo lo más ingenuo posible y, al mismo tiempo, lo más elevado, invocando polaridades metafísicas como ausencia y presencia, estabilidad y cambio, materia e imaginación.